Energías renovables, energía solar y eólica, las más baratas para generar electricidad.

Uso de energías renovables gana espacio en Guatemala

REVE

Cada vez son más los hogares que recurren al uso de energía renovables en Guatemala, a partir de las radiaciones solares, el viento o la biomasa, destacaron hoy fuentes de la Empresa Eléctrica de Guatemala (Eegsa).

 

Esta tendencia es más evidente en el departamento metropolitano, donde está enclavada la capital, aunque existen otras experiencias en distintos puntos del país.

Datos acopiados por Eegsa sugieren que al menos 5,4 megavatios de energía son producidos por mil 558 personas individuales en el territorio, sobre todo para el consumo en los hogares.

La instalación de paneles solares en las casas posibilita a los autoproductores tener a su alcance un equipo de generación de energía renovable y a la vez contribuir con la electricidad producida al sistema de distribución, de acuerdo con explicaciones del gerente comercial de Eegsa, Ricardo Méndez.

El recurso más usado es el Sol, pero también existen usuarios que recurren a la explotación de la generación eólica, puntualizó.

Conforme con la empresa comercializadora Enertiva, un hogar requiere aproximadamente de 100 a 150 kilovatios al mes, por lo cual precisa de tres a cuatro paneles para poder generar esa energía y ello supone una inversión de 384 a 512 dólares, más los gastos de instalación.

Pero la vida útil de estos equipos es hasta de 30 años y el abaratamiento de los costos del servicio posibilitaría recuperar esa inversión en apenas seis o siete años, aseguran especialistas.

Desde febrero de 2015 la generación de electricidad mediante el uso de las radiaciones solares en el país cuenta también con el productor Horus Energy, la planta fotovoltaica más grande de Centroamérica y el Caribe y la segunda de mayor tamaño en América Latina.

El proyecto, impulsado por el consorcio empresarial guatemalteco Grupo Onyx con la colaboración del español Grupo Ortiz, se desarrolló con base en las potencialidades comprobadas en los departamentos orientales de Chiquimulilla y Santa Rosa, ambos bajo un sol radiante y fuertes temperaturas durante casi todo el año.

La ventaja de la generación de este tipo de energía renovable es que es amigable con la naturaleza y no produce emisiones de ningún tipo, por cuanto los paneles o fibras fotovoltaicas se alimentan del calor desprendido por los rayos del Sol.

Ello también redunda en el fortalecimiento de la estabilidad en los precios y genera desarrollo, en un mundo en el cual la tecnología continúa imparable y cuando se quiere puede ser puesta al servicio de los seres humanos sin agredir al medio ambiente, según expertos.

PL