Eólica en Oaxaca, con1.186 aerogeneradores, a la cabeza del sector eólico de México.

Energías renovables: Itsmo de Tehuantepec concentra desarrollo de la eólica en México

REVE

El Istmo de Tehuantepec, en Oaxaca cuenta con un potencial sorprendente para la generación de energía eólica: de acuerdo con la Asociación Mexicana de Energía Eólica (AMDEE) es por eso que de 26 parques eólicos que funcionan en el país, 19 de ellos están instalados en la zona.
La semana pasada se inició el fenómeno meteorológico denominado “Norte”, caracterizado por los fuertes vientos que se registran en la región y que incluso obliga a las autoridades a restringir la circulación en las carreteras de la región de Itsmo, la Transítsmica y la Panamericana, cuando alcanzan los 90 kilómetros por hora, para evitar la volcadura de tráileres y otros vehículos.
Según dio a conocer el Instituto Estatal de Protección Civil de Oaxaca al poner en marcha los operativos de seguridad, la temporada de vientos en esta zona, es cada vez más fuerte y prolongada, ya que su duración ha pasado de cuatro a ocho meses.
En Oaxaca hay zonas con velocidades del viento superiores a 8.5 metros por segundo, con un potencial de generación de 6 mil 250 a 8 mil 800 megawatts.
El viento constituye un recurso renovable de generación de energía, el más limpio que existe porque no produce contaminación del aire ni del agua, ya que no necesita pasar por un proceso de transformación para lograrlo.
La AMDEE afirma que la energía eólica explotable en el Istmo de Tehuantepec podría suministrar un 7 por ciento de las necesidades de energía eléctrica a nivel nacional.
Y los parques eólicos, señala, también son, como grandes obras de ingeniería, importantes generadores de empleo y de progreso. En Brasil, por ejemplo, solo en 2012, dieron trabajo a 15 mil personas.

Desde la antigüedad
La utilización del viento como generador de movimiento o energía no es un suceso nuevo. Culturas de la antigüedad lo ocuparon con los mismos fines. Sólo basta recordar su manejo en el desplazamiento de los barcos de velas, o los molinos de viento que bombeaban agua o trituraban alimentos.
Las tecnologías antiguas han sido retomadas y mejoradas cientos de veces en la creación de generadores eólicos que proporcionan energía de una manera más eficiente y limpia.
Otras fuentes de energía renovable son el sol y el agua; si bien su disponibilidad puede llegar a variar por factores externos, como la contaminación generada por el hombre y los consiguientes efectos del cambio climático.
Una de las variaciones más comunes de las que los humanos han sido testigos en la naturaleza es el cambio de estaciones de lluvia, la prolongación del invierno o las sequías; las tormentas tropicales fuera de temporada y huracanes cada vez más devastadores.
Entre las principales causas de contaminación, afirman especialistas, es la generación de energía mediante sustancias fósiles, petróleo, gas y carbón. Y el más contaminante es el petróleo.
Es por ello que la humanidad marcha hacia el desarrollo de tecnologías que permitan contar con energías más limpias, lo que contribuirá a disminuir los efectos negativos en el ambiente provocados por la utilización de los hidrocarburos.
Esto no significa que los métodos tradicionales de generación de energía desaparezcan; pero sí, que su utilización se reduzca paulatinamente y, con ello, los efectos negativos que causan al planeta.