El sector eólico alerta de los efectos irreversibles de la nueva regulación eólica

Los principales fabricantes de aerogeneradores se muestran contrarios al borrador de normativa que prepara el Ministerio de Industria para el sector eólico y alertan de los efectos "irreversibles" que tendrá, si sale adelante, sobre el tejido industrial, el desarrollo tecnológico y el empleo.

El borrador de normativa para el sector eólico elaborado por Industria contempla, entre otras medidas, un recorte de la retribución que recibirán los parques eólicos que se pongan en funcionamiento a partir de 2013 del 40 % respecto a las primas actuales, según la Asociación Empresarial Eólica (AEE). Por ello, piden al departamento que dirige Miguel Sebastián que reconsidere su postura y modifique el borrador -que se ha enviado a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) sin un consenso previo con el sector- para evitar que se paralice en este momento la industria porque se necesitarán años para poder reactivarla y recuperar el empleo.

Asimismo, solicitan al Ministerio que ponga fin al vacío regulatorio y que instaure un marco normativo que garantice la rentabilidad razonable de los parques eólicos y permita dar continuidad a una industria a la que califican como estratégica. Entre las críticas al modelo planteado por Industria, está la inclusión de un sistema de primas variables en el tiempo, que supondrá que si un año el sector superase el cupo previsto, la prima se rebajaría automáticamente para todos los parques construidos bajo la nueva normativa.

Junto a esto, se limita de 20 a 12 años el cobro de las primas, que sólo recibirán las primeras 1.500 horas de funcionamiento anual de cada instalación. De acuerdo con la propuesta de Industria, la retribución estimada para el periodo (2013-2020) supondrá un sobrecoste total de 800 millones para el sistema eléctrico.

Los fabricantes advierten de que, si se paraliza la industria hoy, no será posible reactivarla ni recuperar el empleo destruido dentro de unos años, con la consiguiente pérdida de oportunidades en y para nuestro país. Por ello, las empresas piden al Ministerio de Industria que reconsidere su postura y modifique sustancialmente el borrador de Real Decreto, de forma que, además de poner fin al vacío regulatorio, se instaure un marco normativo que garantice la rentabilidad razonable de los parques eólicos y permita dar continuidad a esta industria estratégica.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

www.aeeolica.org