La aplicación de este sistema es fruto de la cooperación entre el Paque Natural Los Alcornocales y las empresas responsables del parque eólico, Toquero Renovables y Wigep Andalucía, y se basa en la tecnología aportada por la compañía americana Detect INC, líder mundial en sistemas de evaluación de riesgos aviares e investigación migratoria. Además, la labor de seguimiento y vigilancia ornitológica se realiza con personal de la Universidad de Málaga, que aporta tres biólogos para este proyecto.
Los responsables municipales, acompañados de representantes de las diferentes entidades colaboradoras, visitaron la estación de seguimiento y control para conocer detalles sobre su funcionamiento. El denominado sistema MERLIN utiliza tecnología de detección desarrollada originalmente para la aviación militar de EE.UU. y la NASA.
Se basa en técnicas de radar aplicadas al seguimiento de aves y murciélagos con las que se recogen datos de forma continua, que son analizados para elaborar un modelo de actuación y gestión de riesgos ante posibles impactos en aeropuertos, vertederos y plantas energéticas. Su doble barrido de radar, horizontal y vertical, proporciona datos precisos sobre el paso de aves por la zona. Teniendo en cuenta la dirección del vuelo de cada espécimen y las condiciones meteorológicas del momento, permite la determinación continua del riesgo de impacto en los diferentes aparatos del parque eólico.
El uso de esta tecnología para proyectos de energía eólica, con más de 40 sistemas que ya operan actualmente en el mundo, ofrece ventajas significativas sobre las técnicas convencionales de vigilancia visual. La monitorización de cada aerogenerador permite su uso como dispositivo de alerta temprana, proporcionando un tiempo de antelación necesario para actuar en cada caso. Con esto se logra reducir tanto el riesgo de colisión como el periodo de detención de las turbinas. Además, el desarrollo futuro de este sistema es su funcionamiento automatizado de manera continua, pudiendo controlarse remotamente.
En noviembre de 2008, la Consejería de Medio Ambiente implantó medidas pioneras para evitar este tipo de mortandad en la avifauna, entre las que se incluía la detención de los aparatos cuando se advirtiese la cercanía de algún ave. La red de vigilantes logró reducir las muertes durante el primer año en la provincia de Cádiz en un 27 por ciento, con 908 paradas selectivas de molinos. Este sistema automatizado permitiría mejorar esos resultados con un menor perjuicio a la actividad industrial.
Alfonso Pecino, ha destacado las virtudes de esta nueva aplicación, que permitirá el desarrollo industrial en el municipio minimizando su impacto ecológico: “El aprovechamiento eólico, al ser una energía renovable, respeta el medioambiente en su proceso de producción pero cuenta con el problema de las colisiones ocasionales de aves que se pueden producir. Con esta vigilancia por radar se reduce al mínimo la posibilidad de afectar a la fauna”.
Por su parte, el alcalde barreño, Juan Montedeoca, ha señalado la decidida apuesta del equipo de gobierno por este tipo de energía limpia, con una implicación directa del Ayuntamiento en su gestión, y atendiendo al cuidado del medio ambiente: “El Pino es uno de los pocos parques eólicos que ya cuenta con participación municipal y aumentaremos nuestra presencia en los próximos proyectos. La energía eólica será una pieza fundamental en el futuro desarrollo industrial de Los Barrios, que además nos permitirá cuidar nuestro importante patrimonio en espacios naturales”.
El parque eólico El Pino de Los Barrios comenzó a funcionar en verano de 2006 con once aerogeneradores Vestas V90, siete de 1.800 kW y cuatro de 3.000 kW, los más potentes instalados en serie en España en su momento, ya que cada uno de ellos equivale a veinte de los modelos antiguos presentes en otras zonas de la provincia, de sólo 100 kW.
Esta instalación comenzó a construirse en noviembre de 2005 en la zona sureste de la Sierra de Montecoche con una inversión de unos 35 millones de euros, promovido por Energías Eólicas El Pino, filial de Wigep Andalucía, y con la participación del Ayuntamiento de Los Barrios a través de una sociedad municipal. En su primer año alcanzó los 66.530 mw de producción, suficientes para el suministro eléctrico de 17.000 hogares. Con este aprovechamiento de una energía renovable se logró una producción de electricidad similar a la que suministraría planta termoeléctrica convencional de carbón emitiendo 64.000 toneladas de dióxido de carbono (CO2), 540 de óxidos de nitrógeno (NOx), 150 toneladas de dióxido de azufre (SO2) y 110 de otras partículas a la atmósfera durante un año.
El Ayuntamiento de Los Barrios ya ha anunciado su intención de seguir apostando por el desarrollo eólico con nuevos proyectos industriales con participación municipal en las zonas del Pimpollar y Castillón. El Ayuntamiento será cotitular en un 50 por ciento del próximo parque eólico que constará de 17 aerogeneradores de 40 megavatios. Una vez entre en funcionamiento esta iniciativa, aportaría a las arcas municipales unos cuatro millones de euros al año que podrían incluso incrementarse si se puede ampliar este desarrollo del aprovechamiento eólico hasta los 40 aerogeneradores, con nuevos aprovechamientos de bajo impacto ecológico.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
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