Toyota se asegura el litio de Argentina para las baterías de sus vehículos eléctricos

Sacando ventaja sobre los compradores chinos, la firma de suministro y corretaje Toyota Tsusho Corp., cuyo 21,8% está en manos de Toyota Motor Corp., consiguió el respaldo del gobierno japonés para este acuerdo mediante préstamos baratos. El acuerdo se anunció en Australia y Japón.

El pacto señala cómo la búsqueda de litio de alta calidad para las baterías de los automóviles híbridos y eléctricos está poniendo en marcha una carrera por la materia prima tal como lo hicieron los combustibles fósiles en el siglo pasado.

Con todas las expectativas apuntando a que la demanda de baterías para autos crecerá con rapidez, "creemos que debemos empezar a prepararnos desde ya para poder abastecer a ese mercado", dice Naoto Yamagishi, director general del departamento de recursos metales y minerales de Toyota Tsusho.

Esta inversión les daría a las compañías japonesas la propiedad sobre algunas reservas de litio en lugar de dejarlas a la merced de unos cuantos productores si, tal como se teme, el suministro escasea en los próximos años.

Los fabricantes japoneses de electrónicos ya controlan la mayor parte del mercado de baterías de ión de litio para aparatos como computadoras portátiles. En el acuerdo, la estatal japonesa Japan Oils, Gas and Metals National Corp. le está concediendo a Toyota Tsusho financiación barata para asegurarse una provisión asequible de litio para Toyota y otras compañías que compiten con Corea del Sur y China en el mercado de baterías para autos.

La inversión está valorada en entre US$100 millones y US$120 millones, según fuentes cercanas. Toyota Tsusho pagará por un estudio de viabilidad este año en un proyecto de litio en el norte de Argentina operado por Orocobre Ltd., que cotiza en Australia, y se quedará con una participación de 25% del proyecto resultante.

Pese a que el litio se encuentra en formaciones rocosas de varios continentes, es en pocos lugares que se halla justo debajo de la superficie de salinas donde el clima y la geografía hacen que la extracción sea más barata. Los desarrolladores con acceso a las salmueras bombean el líquido y concentran el litio extraído hasta convertirlo en un polvo blanco.

Yamagishi dice que Toyota Tsusho se puso en contacto con Orocobre, citando la potencial calidad de sus reservas, ubicadas cerca de ricos depósitos en Chile, conocido como la Arabia Saudita del litio. Pese a que no anticipa problemas con el suministro en los próximos cinco años, sí cree que en unos 10 "las provisiones van a estar bajo presión".

Para asegurar el suministro, las firmas de corretaje japonesas, como Mitsubishi Corp. y Sumitomo Corp., buscan activamente oportunidades en América Latina, sobre todo en Chile y Bolivia.

A los precios actuales, el litio sólo representa cerca de 5% del costo de una batería para una laptop o una más grande para un auto. Sin embargo, los márgenes de ganancia en la industria de electrónicos se han reducido con el tiempo.

Se pronostica que el mercado global de baterías de ión de litio utilizadas en autos crecerá a 2,25 billones de yenes (US$24.800 millones) para 2014 frente a los 25.000 millones de yenes (US$27,5 millones) en 2009, según la firma de investigación de mercado Fuji-Keizai.

Sólo 27% del litio va a parar a baterías, según el informe anual de la Sociedad Química y Minera de Chile S.A., que controla 30% del mercado del metal alcalino. El litio también se utiliza para producir cristal cerámico y recubrimientos, para fundir acero y como componente en grasas lubricantes. El metal es extremadamente ligero, resistente al calor y cuenta con otras propiedades que lo hacen ideal para las baterías recargables.

James D. Calaway, presidente de la junta de Orocobre, señala que las mineras que operan en las salinas de Chile pueden incrementar su producción, pero al igual que con los campos petroleros, las reservas de litio podrían salir perjudicadas por una extracción demasiado rápida, minando la producción futura.

Los fabricantes japoneses de electrónicos, ante la amenaza de registrar pérdidas con televisores y otros electrónicos, están tratando de impulsar el suministro de baterías de ión de litio para los autos híbridos y eléctricos del futuro.

Toshiba Corp., Hitachi Co., y NEC Corp. han invertido en el negocio de las baterías de ión de litio para autos, mientras Panasonic Corp. compró una participación mayoritaria en Sanyo Electric Co., el mayor proveedor del mundo de estas baterías, para asegurarse una base más fuerte. Toyota y Panasonic son socias en el desarrollo y la producción de paquetes de baterías de ión de litio para autos eléctricos. Sony Corp. también estudia ingresar a este terreno.

www.orocobre.com.au/