Polonia lidera Europa en energía eólica terrestre en este momento

La energía eólica en tierra tuvo un fuerte final de la década con una serie de subastas que tuvieron lugar en diciembre. Polonia realizó la mayor subasta europea dedicada a aerogeneradores en parques eólicos terrestres con un volumen total de 2.2GW. La oferta promedio de € 49 / MWh fue menor que el precio mayorista de electricidad.

Al final del año también se registraron otros resultados competitivos de subasta para aerogeneradores en tierra en toda Europa. Una subasta lituana resultó en un volumen mayor de lo esperado (0.3TWh) y a precios bajos. Estos esfuerzos demuestran que la energía eólica también jugará un papel importante en la futura combinación energética de Europa Central.

Y Alemania vio una subasta totalmente suscrita por primera vez en 2019: sus 7 subastas anteriores habían sido suscritas por debajo. Sin embargo, sigue siendo difícil obtener permisos para nuevos proyectos de parques eólicos en Alemania y la nueva regla de distancia propuesta no ayudará en esto.

La industria de la energía eólica actualmente emplea a 300,000 personas en Europa, pero su cadena de suministro de turbinas eólicas está bajo una presión creciente. Los volúmenes futuros son cada vez menos claros y la competencia de jugadores no europeos está aumentando. Combinado con una mala formulación de políticas, esto ya ha llevado a 38,000 pérdidas de empleos solo en Alemania desde 2016.

La energía eólica terrestre es fundamental para el éxito económico a largo plazo de Europa, ya que es la forma más barata de nueva generación de energía. No aclarar los volúmenes futuros y agilizar los permisos afectará la capacidad de la industria para ofrecer una transición energética rentable.

Como parte de su Green Deal, Europa debe implementar una estrategia industrial que priorice la competitividad de la cadena de suministro de energía eólica europea. Los europeos deben confiar en que la ambición climática se traducirá en empleos y oportunidades económicas, esto será fundamental para consolidar el apoyo a una Europa climáticamente neutral.