Solar Impulse 2 rompe el récord con el vuelo más largo de la historia con energía solar fotovoltaica

REVE

El vuelo no ha terminado aún, y eso es lo más interesante, ya que aún le quedan otras 40 horas de vuelo para completar la ruta Nagoya (Japón) – Hawai, en la que se encuentra actualmente. Hay que recalcar que esta es la octava de trece etapas del viaje de vuelta al mundo que dio inicio en Abu Dhabi.

Con 80 horas de vuelo sin repostar o aterrizar, André Borschberg ha logrado romper el récord mundial con el vuelo en solitario más largo de la historia. Su logro se debe a la tecnología del Solar Impulse 2, que es un avión solar que ha estado en pruebas para convertirse en un importante punto para el desarrollo de una aviación más eficiente y menos contaminante.

 

Esta ruta con el Solar Impulse 2 estaba previamente establecida para iniciar en Nanjing, China, sin embargo las malas condiciones meteorológicas obligaron a Borschberg a aterrizar en Nagoya y posponer su intento de récord hasta esta semana. Originalmente la vuelta al mundo se había dividido en 12 etapas “manejables”, pero por este pequeño retraso se han tenido que contabilizar 13.

Luego de Hawai, Borschberg llevará al Solar Impulse 2 hacia Phoenix, Arizona; eso sí, antes de ello habrá una pausa para descansar y relevar el mando al co-piloto Bertrand Piccard, quien volará la nave hacia dicho lugar.

Después de atravesar los Estados Unidos, el Solar Impulse 2 cruzará el Atlántico hacia Europa, de donde partirá hacia Abu Dhabi para completar el viaje.

Solar Impulse

Volar por 80 horas consecutivas no es algo que suene tan placentero, y menos en una pequeña cabina como la del Solar Impulse 2. Borschberg comenta desde el avión que las primeras 24 horas han sido muy “técnicas”, sin embargo el segundo día fue un poco más relajado gracias a que ha podido tener tiempo para crear una relación de confianza con el avión; “eso me permite descansar y eventualmente dormir por períodos de 20 minutos con el piloto automático”, indicó. “La experiencia de vuelo es tan intensa que sólo puedo concentrarme por momentos y descubrir cómo lidiar con mi propia energía y mentalidad”, concluyó.

El récord anterior lo tenía Steve Fossett, quien en el 2006 voló 76 horas consecutivas a bordo del Virgin Atlantic Global Flyer. Borschberg ya ha tenido otras experiencias similares, y su misión está en el hecho de apoyar las energías renovables como una alternativa eficiente y óptima para la aviación.

Obviamente hay bastante trabajo qué hacer todavía. Dudo mucho que hayan personas que quieran pasar varios días volando desde Japón hacia Estados Unidos en una pequeña cabina congelada, pero igual, el avance es obvio y lo más probable es que dentro de algunos años podamos tener aviones tan potentes como los actuales funcionando con energía solar.