energía solar fotovoltaica de Honduras

Avances de China permiten renacer energía fotovoltaica en España

Los avances tecnológicos de China han permitido el renacer de la energía fotovoltaica en España, país que tiene condiciones para ser uno de los líderes mundiales del sector por las 1.808 horas de sol que recibe al año.

El presidente de la Unión Española Fotovoltaica (Unef), José Donoso, afirmó en entrevista con Xinhua que «la disminución de los costes de la tecnología en este sector, liderada por los avances que ha hecho China, ha provocado que el sector fotovoltaico haya renacido en España debido a su alta competitividad».

El gobierno del socialista Pedro Sánchez eliminó en junio pasado el llamado «impuesto al sol», y dio alas a esta forma de generar electricidad en España.

El viernes, el gobierno español aprobó el nuevo Plan Nacional Integrado de Energía y Clima 2021-2030, con el cual dio un fuerte respaldo a las energías renovables como la fotovoltaica.

«Tiene sentido porque es una energía limpia y, sobre todo, es la más barata de producir, sólo comparable a la eólica en sitios que tienen mucho viento. Es incluso más barata que cualquiera de las llamadas energías convencionales», dijo Donoso.

Actualmente, un 3,4 por ciento de la energía que se consume en España es fotovoltaica, en un sector liderado por la energía hidráulica (24 por ciento), eólica (22 por ciento) y la nuclear (19 por ciento).

El año pasado se instalaron en España 261,7 megavatios (MW) de nueva potencia fotovoltaica, lo que supuso un incremento del 94 por ciento respecto a los 135 MW instalados en 2017 y un importante crecimiento frente a los 55 y 49 MW registrados en 2016 y 2015, respectivamente.

Las previsiones se mantienen optimistas para el futuro en España, ya que en la última subasta que realizó el gobierno español, el sector fotovoltaico se adjudicó 3.909 MW de los más de 5.037 MW otorgados, los cuales deberán ser instalados antes de que termine el 2019.

«Por eso intentamos desterrar la idea de que es la energía del futuro. Está bien, pero en realidad es ya la energía del presente», expresó el presidente de la Unef.

El plan que presentó el viernes el Ejecutivo español prevé que el uso de la energía fotovoltaica se múltiple hasta nueve veces en 2030.

Según Donoso, el desarrollo de la energía fotovoltaica provocará «un regreso de todo el talento joven que emigró de España por la crisis de 2008» y fomentará la creación de nuevos puestos de trabajo.

El nuevo plan energético apunta a que 102.000 y 182.000 nuevos empleos en España provendrán de energías renovables como la fotovoltaica.

Donoso también señaló que al ser una energía limpia y barata, el auge del sector fotovoltaico abarataría la electricidad en España, el quinto país que más paga en la factura de la luz, con unos 220 euros por MW, sólo detrás de Alemania, Dinamarca, Bélgica y Portugal

Donoso destacó que en el país con más horas de sol de Europa, las posibilidades de implementación de energía fotovoltaica son «enormes».

«Se pueden instalar en los alrededores de las grandes ciudades, también en municipios medianos, pueblos, campos y caminos. Darían un montón de nuevos trabajos por su diseño, instalación y mantenimiento. Sería económicamente rentable para el país», dijo Donoso.

La nueva estrategia energética movilizará unos 236.000 millones de euros para 2030, de los que el 80 por ciento provendrán del sector privado.

El camino señalado por las medidas del Ejecutivo y apoyado formalmente por la Unef supondría que España se convertiría en 2030, junto con Alemania, en el líder del bloque europeo en energía fotovoltaica.

«Si se cumplen los objetivos del Plan Nacional de Energía y Clima, el 74 por ciento de la electricidad vendrá de fuentes de energía renovables. De ese porcentaje, el 25 o el 30 por ciento vendrá del sector fotovoltaico», indicó Donoso.

Además, el presidente de la Unef destacó el liderazgo de China en la producción de una energía que no contamina, la cual se encuadra dentro de la Agenda 2030.

Donoso afirmó que en China «han realizado una buena cantidad de avances tecnológicos que han democratizado la energía fotovoltaica. Esta producción ha abaratado los costes y ha provocado que países como España puedan acceder a los nuevos diseños».