Chile invertiría en energías renovables en El Salvador

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El Salvador le expone a una delegación de inversionistas chilenos la Política Energética Nacional y sus ventajas para seducir al empresariado a quedarse en el país.

Los proyectos de generación de energías renovables que propone El Salvador para diversificar la matriz energética nacional, ha sido conocida por una delegación empresarial de Chile que se encuentra en el país participando en el Foro de Cooperación Técnica Chile-El Salvador inaugurado el lunes.

Representantes de Distribuidora de Electricidad DELSUR, el Ministerio de Relaciones Exteriores, el Consejo Nacional de Energía (CNE), el Organismo Promotor de Exportaciones e Inversiones de El Salvador (Proesa) y  la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (Siget), dieron una amplia panorámica de los proyectos.

“Nos hemos planteado el uso eficiente y el ahorro de energía, la reforma y la actualización de los marcos regulatorios y la ampliación de la producción en energía renovable”, dijo el Ministro de Relaciones Exteriores, Hugo Martínez, al explicar parte del plan quinquenal que impulsa el Presidente Salvador Sánchez Cerén, en esta materia.

Según voceros oficiales, entre la delegación de empresarios asistentes se encuentra un sector interesado en invertir en El Salvador.

En tanto, El Salvador espera escuchar las lecciones aprendidas en los países suramericanos representados en el foro, en el marco del  proceso de inserción y la identificación de los principales factores que limitan el crecimiento de la industria de energías renovables no convencionales.

La delegación hará visitas prospectivas a las zonas identificadas con potencial para el desarrollo de proyectos de generación de energía fotovoltaica y eólica.

Este martes habrá una serie de reuniones con autoridades del gobierno salvadoreño para ampliar el conocimiento de la comitiva empresarial en cuanto a los requisitos que deben considerar para invertir en El Salvador.

El presidente de PROESA, Sigfrido Reyes considera que el empresariado chileno ha sido atraído “por las ventajas competitivas de nuestro país y que podrían ser la ventana para expandir y diversificar aún más la inversión extranjera directa”.