Energías renovables: La eólica reduce las emisiones de CO2

Repunte de las emisiones totales de CO2

REVE

Energías renovables, eólica, energía solar fotovoltaica y termosolar, para reducir CO2.

El Observatorio de la Electricidad de agosto de WWF subraya el nuevo repunte de las emisiones totales de CO2 debido principalmente al aumento de la quema de carbón en el mix de generación de nuestro país.

La organización considera necesario un cambio urgente en las fuentes de energía, pasando de la actual quema de carbón y gas, hacia un modelo energético más limpio y sostenible que esté basado en una generación renovable, sin emisiones contaminantes. Además, WWF exige a Europa una apuesta decidida por una estrategia más ambiciosa en clima y energía para 2030 y urge al Gobierno para que nuestro país recupere su liderazgo en materia de renovables, apostando por un modelo energético más sostenible, basado en renovables, generación distribuida y autoconsumo con balance neto, ahorro y eficiencia energética.

 

La concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera alcanzó un máximo sin precedentes en 2013, según la Organización Meteorológica Mundial. El dióxido de carbono (el principal gas causante del cambio climático) aumentó su concentración a un ritmo que no se había registrado en casi 30 años. Ante este máximo histórico, WWF recuerda que es imprescindible y urgente pasar de los combustibles fósiles, cuya quema vierte grandes cantidades de CO2 a la atmósfera, a un modelo energético sostenible, eficiente y renovable.

 

Para lograr esta reducción de emisiones, WWF espera que se llegue a acuerdos ambiciosos y objetivos vinculantes, tanto a nivel europeo como nacional, en el próximo Consejo Europeo del 23 y 24 de octubre, donde se debatirá el futuro marco de Clima y Energía de la Unión Europea para 2030. En concreto, la organización demanda para 2030 una política adecuada con los siguientes objetivos: un 55% de reducción de emisiones (respecto a los niveles de 1990); un 45% de energías renovables en el consumo de energía final y un 40% de ahorro y eficiencia energética respecto a los niveles de 2005.

 

Según WWF, lo ideal sería que tanto los objetivos de reducción de emisiones, como los de renovables y eficiencia energética, aprovechen las sinergias entre las políticas que permiten mayores reducciones de emisiones, y se enmarquen en un escenario de precios de carbono adecuados.

 

Para Raquel García Monzón, Técnica de energía del Programa de Cambio Climático de WWF España: ‘El cambio climático es un reto sin precedentes en el que Europa debería dirigirse hacia un modelo energético más sostenible y renovable para 2030. Asimismo, tendría que conseguir una mayor seguridad energética a través del aumento de la autosuficiencia energética con el fomento de energías autóctonas, como son las renovables, que además de ser más baratas tienen beneficios en la salud y el empleo”.

 

Y añade: “Las decisiones políticas que se tomen en Europa en el Consejo Europeo de octubre marcarán el futuro energético de nuestro país. Actuar de forma responsable en la lucha contra el cambio climático supone una oportunidad para liderar un futuro que es, sin lugar a dudas, renovable. También supone una oportunidad para generar empleo y mejorar nuestra balanza comercial. Todo esto tendría impactos positivos en el PIB, ayudaría a disminuir la dependencia energética, a dinamizar nuestra economía y a mejorar la competitividad gracias a la reducción de costes de la energía, ya que cuanto mayor sea la entrada de renovables en la red, más se contribuye a la bajada del precio del pool en el mercado mayorista de la electricidad”.

 

“Desde WWF queremos recordar a los gobiernos que conseguir unos objetivos más ambiciosos en clima y energía para 2030 tiene múltiples beneficios, no solo ambientales, sino económicos y sociales”, concluye Monzón.