Eólica en Brasil: proyectos eólicos de Pacific Hydro, por José Santamarta

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Pacific Hydro invertirá 1.500 millones de dólares en los próximos cinco años en proyectos eólicos brasileños.

El desembolso se utilizará para ampliar la capacidad eólica instalada de la compañía en el país más grande de Sudamérica de 58 MW a 400 MW, ya sea con proyectos en operación o en construcción, según la gerenta general en Brasil de Pacific Hydro, Adriana Waltrick.
«Nuestra cartera de desarrollo en Brasil incluye varios proyectos en el noreste del país», señaló Waltrick. «Brasil es un mercado en crecimiento para Pacific Hydro. Actualmente, representa un 10% de nuestros negocio mundial y aparecemos en el lugar número 30 en el mercado brasileño de energía renovable en términos de capacidad instalada».
La energía eólica, que actualmente aporta cerca de 2,5 GW a la red nacional de Brasil, será la fuente energética de más rápido crecimiento de Brasil en la próxima década, según la empresa federal de planificación energética EPE.
Casi 600 parques eólicos con una capacidad instalada combinada de 16 GW debieran incorporarse a la matriz de generación del país en los próximos ocho años.
El crecimiento de la industria ha sido impulsado por la mayor competitividad, y los precios de la energía han bajado hasta a 87,94 reales (US$43,3)/MWh en la subasta A-5 de diciembre pasado.
Pero Waltrick cree que los precios se deben estabilizar si la generación eólica pretende ser rentable.
«Creemos que muchos proyectos recién adjudicados en subastas eléctricas tendrán difíciles condiciones de implementación y operación y podrían no tener los retornos económicos deseados por la mayoría de los inversionistas», señaló.
«Con nuestros 20 años de experiencia en proyectos de energía limpia creemos cada proyecto se debe analizar en forma individual y considerando la geografía, volatilidad del recurso eólico, duración y condiciones del acuerdo de compra de energía, costos del gasto de capital y presupuesto de operaciones durante la vida útil del activo, opciones de financiamiento y las dificultades para preservar el flujo de caja, entre otros».