La autonomía del coche eléctrico

¿Cuánta autonomía tiene el vehículo eléctrico?. Esta es una de las típicas preguntas que la gente se pregunta cuando le viene a la cabeza el coche eléctrico y es algo que suele provocar cierto miedo o incertidumbre a quedarse sin batería a mitad del trayecto.

La verdad es que no hay desarrollada una homologación específica para medir su autonomía, pero es algo que también se podría decir de los coches de combustión. Es cierto que resulta complicado alcanzar la autonomía que marcan los fabricantes, porque una cosa es la conducción en condiciones idóneas y otra muy distinta, las condiciones reales de conducción. Existen muchas variables que pueden modificar la autonomía.

En los coches eléctricos, además del estilo de conducción hay que añadir también la temperatura ambiental, el uso de los extras que pueda tener el coche como por ejemplo la calefacción u otros, la topografía del terreno, etc. La autonomía suele rondar los 150km aunque algunos fabricantes llegan hasta los 200 o incluso más (me refiero a los utilitarios estándar, no coches tipo Tesla Roadster). Sí bien es cierto, esa autonomía como hemos comentado, puede bajar según que condiciones haya hasta los 50km más o menos.

Como dato curioso, comentaros que el record de autonomía de un coche eléctrico es de unos 556km, conseguidos con un coche preparado para la ocasión. De hecho, tan preparado que llevaba 8320 baterías cilíndricas de ion litio, algo que por motivos obvios no es viable en el día a día de un coche de estas características.

De todas formas, los fabricantes ya están trabajando en el desarrollo de nuevas baterías que proporcionen una mayor autonomía y en los próximos años ya podremos ver coches con una autonomía real de más de 350km. Ese logro debería ir unido a lograr bajar el coste de producción de las baterías que puede llegar hasta el 80% del coste del coche. No olvidemos que es una tecnología que está en pleno desarrollo.

No debemos de olvidar que la función de los coches eléctricos es la de ayudar a hacer de las ciudades un lugar más agradable y limpio y el de cambiar la mentalidad de transporte de la gente, por eso hay que tener claro que su utilidad está pensada para el transporte urbano y metropolitano (al menos a día de hoy). No hay que tener miedo a esas cifras porque tenemos que tener en cuenta que la media de nuestros desplazamientos diarios es de unos 47km aproximadamente por lo que no deberíamos tener ningún problema.

De momento, desde el punto de vista del usuario/conductor que está mentalizado y concienciado de la necesidad del uso de estos coches, es importante realizar un pequeño estudio sobre el recorrido diario que hace cada uno y ver si realmente necesita el coche de combustión o sí por el contrario, puede hacer uso de un coche eléctrico u otro vehículo sostenible, que no hay porque comprar ya que existen sitios donde se pueden alquilar y compartir incluso por horas, como en el edificio CEDEMOS (Getxo) que Emaús Bilbao va a empezar a gestionar dentro de poco.

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