Pero, esto son solo perspectivas de futuro. Por de pronto, la penetración de las renovables en el sistema eléctrico canario aumentó un 12,65% durante el mes de julio, gracias a la producción de la energía fotovoltaica, lo que servido al Gobierno de las islas para mantener su compromiso con todos los proyectos e iniciativas en este sentido y que se bifurcan en varias direcciones.
En este contexto, Canarias ha cumplido con el 90% de las previsiones fijadas en el Plan Energético a falta de cuatro años para alcanzar los objetivos apalabrados. Según los datos del Gobierno canario, ya se han instalado 122 megavatios de los 160 previstos de origen fotovoltaico para 2015 en el documento aprobado por el Parlamento de Canarias en 2007. Asimismo, han indicado que de cara al futuro, el archipiélago pretende alcanzar un 30% de energía eólica en la cobertura de la demanda eléctrica para 2015.
Es un objetivo ambicioso, pero también realista, que ni la crisis podría frenar, porque la alternativa de las energías renovables abre las puertas a puestos de trabajo y a un potencial en inversión sin emisiones de CO2.