La eólica Impsa se consolida en el mercado eólico brasileño

La empresa argentina de equipos de energías renovables IMPSA espera aumentar en un 55 por ciento sus cartera de proyectos pendientes hasta 7.000 millones de dólares en el 2012. Lucas Pescarmona, director de operaciones de IMPSA, dijo en una entrevista con Reuters que proyecta ventas por entre 1.700 y 2.000 millones de dólares en el 2012.

"Nuestro backlog es hoy de 4.500 millones de dólares, de lo cual 70 por ciento es Brasil (…) La idea que tenemos en estos próximos 12 meses es llevarlo hasta unos 7.000 millones", dijo el ejecutivo.

Dos de los proyectos hidroeléctricos con los que IMPSA espera aumentar sus órdenes son en Brasil y otros dos en otros países de América Latina, una región que crece sedienta de energía.

Pescarmona dijo que IMPSA tiene un 25 por ciento del mercado de equipos de generación eólica e hidroeléctrica de América Latina. La empresa también opera en generación.

IMPSA ampliará en el 2012 su capacidad de producción con la construcción de una segunda fábrica de generadores eólicos en el estado brasileño de Río Grande do Sul.

"La nueva fábrica aumentará un 50 por ciento nuestra capacidad. Hoy estamos fabricando 400 máquinas y vamos a poder hacer 600", dijo el ejecutivo.

La planta en la frontera sur de Brasil permitirá además abastecer al vecino Uruguay, donde IMPSA acaba de firmar un contrato para instalar un parque eólico de 65 megavarios y ve un potencial de hasta 500 megavatios en los próximos seis años.

IMPSA tiene actualmente una fábrica de equipos eólicos en el estado de Pernambuco, en el nordeste de Brasil, y está invirtiendo en la construcción de otra planta de turbinas hidroeléctricas para abastecer la mega represa amazónica de Belo Monte y otros proyectos en la región.

Un 60 por ciento de los clientes de IMPSA está en Brasil.

"Brasil es el número uno por lejos. Es donde creemos que van a existir las mejores y mayores oportunidades", dijo Pescarmona.

IMPSA ve también negocios eólicos en Argentina, Chile y Perú e hidroeléctricos en toda América Latina.

"Soy muy bullish (optimista) sobre el mercado energético de América Latina, porque los países están creciendo y requieren energía", dijo.

Pescarmona dijo que IMPSA apuesta también por el segmento de modernización de hidroeléctricas, a medida que las plantas de la región envejecen y necesitan ser repotenciadas.

"Yo diría que el refurbishing puede llegar a ser un 30 por ciento del mercado regional de hidro", dijo.

El director operativo de IMPSA prevé que las oportunidades en Brasil y América Latina vuelvan más agresiva la competencia de las empresas europeas que han perdido mercados por causa de la crisis.