Impsa Wind, la apuesta argentina por la eólica

Hasta hace unos años sólo estaba el viento. Desde que nació Impsa Wind, Argentina también tiene la capacidad de fabricar los aerogeneradores eólicos que completan el círculo virtuoso de la energía eólica y así generar energía limpia y puestos de trabajo.

Emilio Guiñazú es el gerente general de esta compañía de la familia Pescarmona. Impsa Wind nació hace una década como el emprendimiento más osado del grupo multinacional fundado en 1907 en Mendoza.

-¿Como surgio la idea de comenzar a fabricar turbinas eólicas?

-Impsa siempre tuvo una vocación por las energías renovables. Venimos trabajando hace más de 50 años en energía hidroeléctrica. Pasar a la energía eólica fue un paso natural.

-¿Es dificil competir desde Argentina en tecnologias de este tipo?

-Es difícil para todos, no sólo para los argentinos, porque es una industria que avanza a pasos agigantados. Un equipo diseñado hace seis meses puede quedar obsoleto. Permanentemente están entrando nuevos jugadores que te levantan la vara. El desafío técnico es tremendo.

-¿Y como les va?

-Muy bien. En innovación, estamos entre los mejores a nivel mundial. Hoy somos el principal fabricante del hemisferio sur, con proyectos eólicos en cinco países. Construimos más de cien aerogeneradores al año. Acabamos de inaugurar Arauco en La Rioja, el parque eólico más grande de la Argentina. Dominamos el mercado brasileño y producimos para Asia, con una fábrica propia instalada en Malasia. Vamos empujando el límite de la tecnología en la región.

-¿La energia eolica ya esta en condiciones de competir con otras energías?

-Hoy, la energía eólica es competitiva y eficiente, no sólo desde el punto de vista ambiental sino económico y práctico. Cuando un país tiene problemas de energía, la energía eólica es la tecnología más rápida de desarrollar.

-¿Cual es su opinion sobre el desastre nuclear ocurrido en Japon?

-Es una desgracia tremenda. Sin duda obligará a repensar algunos aspectos

-¿Esa crisis nuclear posicionó a la energia eolica?

-No se abandonará la energía nuclear, pero veremos un interés reforzado por las energías renovables. Si la hidráulica y la eólica trabajan complementariamente se pueden obtener resultados espectaculares.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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