Eólica en Ecuador: parque eólico Villonaco

Al cerro del Villonaco, en Loja, llegaron ayer 15 máquinas que iniciarán la apertura de una vía de 1.600 metros de largo y 60 de ancho que conducirá al primer proyecto eólico de Ecuador. Cuando el exministro de Electricidad y Energía Renovable, Miguel Calahorrano, visitió Loja en diciembre de 2010, prometió que la obra arrancaró en enero de este año, pero el proyecto empezó a gatear hace dos días.

En la montaña lojana se ubicarán 11 aerogeneradores y en el inicio de los trabajos participarán 25 personas entre técnicos, ingenieros y trabajadores. Para la construcción de las vías de acceso, que se terminarán en enero de 2012, se cuenta con un presupuesto de 511 mil dólares.

Las autoridades aseguran que este trabajo vial se hace con delicadeza para no afectar el ecosistema. Únicamente será removida el área necesaria, se levantará una capa vegetal de 25 cm y serán ubicadas en las escombreras. Terminado el trabajo, aseguran que el terreno será nuevamente compactado en las áreas respectivas.

Las turbinas eólicas que se instalarán tienen una altura de 80 metros y las palas de los aerogeneradores oscilan entre 60 a 63 metros de diámetro. Para el montaje se utilizará una grúa para 300 toneladas que será trasportada posiblemente de EE UU o Panamá.

El proyecto eólico también cuenta con la construcción de un centro de convenciones donde los estudiantes puedan conocer el significado del parque, cuya primera etapa contemplará 16 megavatios. Una vez que se realice el primer pago por parte de la Corporación Eléctrica del Ecuador (Celec), las autoridades y encargados del proyecto tienen 60 días para entregar la segunda parte del parque que representaría 30 megavatios más, dando un total de 65 megavatios.

La Celec además deberá restituir al gobierno provincial la inversión realizada hasta la fecha, lo cual ronda los 2,5 millones de dólares. Para Rubén Bustamante, prefecto, esta actividad significará turismo académico. “La idea es convertir a la ciudad en el centro de desarrollo eólica del Cono Sur, por la potencialidad de viento que se genera el Villonaco”.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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