Experiencias innovadoras de sostenibilidad

Dentro de la programación los Cursos de Verano de la UIMP en Santander, se celebró en septiembre un encuentro cuyo sugestivo título era: "¿De quién es la iniciativa?. Experiencias innovadoras para una sociedad sostenible".

Nuestra Universidad se congratula del desarrollo de este tipo de cursos que contribuyen a llevar al ámbito académico experiencias innovadoras que encajan en los nuevos conceptos de economía sostenible.

El escritor Alex Rovira aclaraba en su ponencia de Santander que el vocablo griego "krinein" (decidir, distinguir, separar, escoger) comparte raíz, con "krisis", momento decisivo, punto de inflexión y con crítica (análisis, estudio), y con criterio (razonamiento adecuado, reflexión). Resulta, por tanto, que las experiencias innovadoras que se describen, son básicas para reflexionar acerca de las técnicas agrarias adecuadas a un nuevo modelo de sociedad sostenible y competitiva para el siglo XXI.

En este sentido, en un mundo donde "todos hacen de todo" es preciso no sólo hacer las cosas bien, adaptándose a los gustos de un nuevo consumidor, que exige calidad excelente, sostenibilidad, junto con costes óptimos, servicio flexible y eficaz; sino que hay que diferenciarse.: Diferenciarse a través de la innovación.

Y ya que como se puede ver en el informe "Stern Review on the Economics of Climate Change" (1) (2007) , el cambio climático puede provocar la drástica reducción de la producción agraria en países de latitudes bajas, y suelos de contenido orgánico bajo, como consecuencia de las emisiones de CO2 y otros gases de efecto invernadero. CO2 generado entre otras causas por prácticas agronómicas susceptibles de reducir estas emisiones. Se hace imprescindible que los agricultores se planteen como contribuir a la reducción de las emisiones globales de gases de efecto invernadero valorado a lo largo del ciclo de vida de un producto, desde las materias primas necesarias para su producción hasta su consumo, destrucción o reciclaje (Huella de CO2), lo que justificaría el papel medioambiental de la agricultura en el balance de los gases de efecto invernadero (GEI).

Los Sistemas Ingeniosos del Patrimonio Agrícola Mundial, presentados por P. Koohafkan, permiten plantear soluciones técnicas a los problemas de la agricultura en países poco desarrollados y para luchar contra la subalimentación de sus habitantes. Permitiendo desarrollar prácticas agrarias para "uso de la tierra, agua y ecosistemas ricos en diversidad biológica, que han evolucionado gracias al ingenio y a la adaptación dinámica de una población/comunidad a su ambiente y a las necesidades y aspiraciones para un desarrollo sostenible (FAO, 2002)".

Jesus Caldera, IDEAS, "Innovación e iniciativas para la sostenibilidad", describe los sectores industriales más significativos para el panorama español del siglo XXI: energías renovables, las eco-industrias, las tecnologías de la información y la comunicación, la biotecnología, la industria aeroespacial¸ las industrias culturales, y los servicios sociales (Ley de Dependencia). Resalta la necesidad de mejorar la formación de recursos humanos, la asignación de recursos financieros y humanos para la I+D (pública y privada), y la priorización de la financiación para sectores de alto valor tecnológico.

J.L. Suárez "Los edificios y las viviendas que necesitamos", pone de manifiesto que el 50% del calentamiento global se puede atribuir al CO2 generado por los combustibles fósiles usados en la calefacción de edificios, y que análogo porcentaje (50%) de los recursos mundiales se dedican a la construcción. Ello implica la importancia de repensar los modelos y los diseños constructivos haciéndolos más sostenibles y eficientes.

El biogás es un gas combustible compuesto principalmente de metano (CH4) y dióxido de carbono (CO2), que se obtiene como resultado de la fermentación anaerobia (en ausencia de oxígeno) de materiales orgánicos biodegradables. 1 m3 de biogás equivale a la energía de 0.65 m3 de gas natural y puede llegar a producir 2.1 kWh de energía eléctrica renovable. En "El futuro de la biomasa", M. Martín Larrañaga incide en estos aspectos. Parece que la gestión eficiente y sostenible de la industria agroalimentaria, y de ello existen suficientes ejemplos, exige aprovechar de forma integral los recursos agrarios y ganaderos, incluyendo en ese aprovechamiento integral todo tipo de restos orgánicos, desde los residuos de la producción y transformación, hasta el estiércol o los purines. Y por supuesto una vez producido el biogás, los lodos orgánicos residuales de la fermentación.

El transporte tiene un gran impacto en el consumo energético y por supuesto en las emisiones globales de GEI. En el 2006, el transporte fue el responsable de cerca de un cuarto (23,8%) de las emisiones globales de gases con efecto invernadero (GEI). F. Acebrón "El vehículo del futuro inmediato", propone un necesario cambio en el modo de transporte desde la carretera y la aviación (grandes emisores de CO2), al ferrocarril, que es el modo de transporte con mejor comportamiento medioambiental. El derecho a la movilidad individual sostenible, y más concretamente la industria del automóvil presenta un amplio bagaje de esfuerzos e innovaciones tecnológicas para reducir el impacto medioambiental de los vehículos. La electrificación del transporte representa una parte de la solución. La infraestructura de recarga, red de electrolineras, junto con otros aspectos recogidos en el modelo "smarter cities" (2) y la aceptación del cliente son clave.

La empresa agroalimentaria ante el reto de la sostenibilidad debe de seguir el camino de introducir la cultura del cambio, la reingeniería e innovación de métodos y procesos en la gestión de la empresa agroalimentaria. Esta es la propuesta de D. Frontera: "La agricultura industrial: retos e itinerarios ante la sostenibilidad". Anteriormente, se ha señalado la importancia de la generación de biogás, a partir de la co-digestión anaerobia) de residuos de producción y transformación de producto agropecuarios y agrarios. Los responsables de la gestión de la empresa deben favorecer y estimular una cultura que aporte actitudes y aptitudes, como la curiosidad, la imaginación, la creatividad…

A. García Allut, "Pesca tradicional, Internet y responsabilidad ecológica", expone la experiencia innovadora de "Lonxanet", cuyo objetivo es contribuir a la toma de responsabilidades económicas, ambientales y sociales de las poblaciones de pescadores artesanales en Galicia. Un mundo en dónde los pescadores y pescadoras artesanales son valorados por toda la sociedad, porque participan de un modo activo como albaceas y custodios de los ecosistemas que explotan contribuyendo, con este rol social, a la construcción de un mundo más sostenible. Inclusión social y participación ciudadana co-responsabilidad, empatía social y colaboración activa, equidad, transparencia, sostenibilidad y visión de largo plazo, es la visión que se quiere dar desde esta experiencia.

"La central hidroeólica de la Isla de El Hierro", de J. Morales, muestra un proyecto que conseguirá transformar una fuente de energía intermitente (eólica) en un suministro controlado y constante de electricidad, maximizando el aprovechamiento de la energía eólica. La mayor parte de la energía vertida a la red de distribución de la isla provendrá de la central hidroeléctrica. El excedente de energía eólica se verterá directamente a la red, sirviendo para la desalación de agua.

En muchos lugares de España, la excelente calidad de los productos agropecuarios y pesqueros, y la gastronomía tradicional, junto con la innovación, han dado lugar a una importante actividad a mitad de camino entre turismo y cultura, en la que el paisaje y el patrimonio cultural acaban por darle unas características que inciden muy positivamente en el desarrollo sostenible del territorio. Esta es la experiencia innovadora que nos muestra D. Lasa, "La restauración de proximidad. La alta cocina ligada a los sistemas agroalimentarios locales". En esta misma línea no podemos olvidar la creación del "Basque Culinary Center", la universidad española dedicada a la gastronomía, que implica la inclusión de la gastronomía en la enseñanza superior y la investigación.

En nombre de la UIMP, me gustaría agradecer vivamente al Ministerio del Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, el patrocinio del Curso, que da origen a esta publicación, así como a los ponentes, secretario y director. Estoy seguro que la publicación de este curso actuara como catalizador de nuevas ideas para la innovación del sector agrario.

Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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