Estas alteraciones son parte de una reorganización de los climas árticos que se prevé a finales del siglo XXI, según lo proyectado por un equipo de la Universidad de Nebraska y climatólogos de Corea del Sur. En un artículo que se publicará en un próximo número de la revista "Climate Dynamics", el equipo de investigación analizó 16 modelos de clima global desde 1950 hasta 2099 y lo combinó con más de 100 años de datos de observación para evaluar lo que el cambio climático podría significar para los sensibles ecosistemas árticos en los albores del siglo XXII.
El trabajo es uno de los primeros en aplicar un sistema de clasificación climática específica de un examen exhaustivo de los cambios climáticos en todo el Ártico, para lo que se utilizan tanto las observaciones como una colección de proyecciones de futuros cambios climáticos, dijo Song Feng, autor principal del estudio. Sobre la base de las proyecciones climáticas, el nuevo estudio muestra que las zonas del Ártico ahora dominadas por los tipos de clima polares y subsolares disminuirán y serán reemplazadas por climas más templados, cambios que podrían afectar a una cuarta parte o casi la mitad del Ártico, en función de escenarios futuros de emisiones de gases de efecto invernadero, para el año 2099.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
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