Minieólica: Sonkyo desarrolla un prototipo de aerogenerador eólico

La iniciativa, valorada en un millón de euros, persigue la creación de un aerogenerador eólico con una potencia de 15 kilovatios que incorpore el sistema patentado de paso variable. Un mecanismo que Sonkyo Energy ya viene desarrollando con éxito con sus aerogeneradores de pequeña energía eólica Windspot.

A diferencia de los modelos precedentes, esta tecnología se adapta a la velocidad del viento en función de su fuerza e intensidad. De este modo se puede trasladar este sistema a potencias mayores, para lo que es necesario incidir en distintas áreas tecnológicas, como la aerodinámica, la mecánica, la electrónica o el control.

De ahí la complejidad del diseño y la necesidad de la intervención de varios agentes: el Departamento de I+D+i de Sonkyo Energy, Setelsa, INTA (el Instituto Nacional de Tecnología Aeroespacial) y CT Innova. Esta última se ocupará del área electrónica, el INTA de la dinámica y la empresa cántabra Setelsa de todo el proceso del control del prototipo.

Sonkyo Energy es una empresa con sede en Cantabria que cuenta con distribuidores de energía eólica en 14 países de todo el mundo y con oficinas estables en países como Taiwan, China, India y Estados Unidos.En total, el grupo empresarial al que pertenece, emplea a un centenar de personas, 60 de ellas en la comunidad autónoma.

Su trayectoria se inició en el año 2009 con la presentación del aerogenerador especializado en pequeña eólica Windspot, en la feria Windpower de Chicago (Estados Unidos). Desde entonces ha llegado a acuerdos tecnológicos con instituciones y empresas como la Universidad de Arkansas, el SEPEN de Francia, el CIEMAT (el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas del Ministerio de Ciencia e Innovación) o la Universidad de Masdar en Abu Dhabi (Emiratos Árabes Unidos), entre otros.

Setelsa (Sistemas Electrónicos y de Comunicaciones, S.A.) es una ingeniería electrónica puntera en España con amplia experiencia en el desarrollo de proyectos de tecnologías de la información y la comunicación en áreas como la banca o los transportes, entre otros.

La ayuda del CDTI permitirá incorporar a este proyecto a una decena de personal cualificado externo que trabajarán en el diseño del prototipo con la intención de que empiece a funcionar en 2012 y que, finalmente, pueda introducirse en el mercado.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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