Eólica en Andalucía: La Junta concede la AAU a proyectos eólicos

La Consejería de Medio Ambiente ha concedido en los dos últimos meses la Autorización Ambiental Unificada a diez empresas para poner en marcha proyectos de generación de energía eléctrica mediante biomasa, parques eólicos y para la instalación de plantas solares termoeléctricas.

Dicha autorización simplifica en un permiso único los distintos procedimientos administrativos de prevención y control ambiental que se exigen para determinados proyectos y actividades.

La AAU, prevista en la Ley de Gestión Integrada de la Calidad Ambiental de Andalucía, se caracteriza por simplificar en un permiso único los distintos procedimientos administrativos de prevención y control ambiental que actualmente se exigen para determinados proyectos y actividades económicas, incluidas las determinaciones resultantes de la evaluación ambiental de las actividades que se autorizan, ha informado la Consejería de Medio Ambiente a través de un comunicado.

Dentro de estos proyectos de energías renovables y tratamiento de residuos, la mayor parte de los mismos se localizan en la provincia de Almería, con seis autorizaciones. De éstas, cinco son para anteproyectos de construcción de parques eólicos e instalación de turbinas eólicas y una para la ejecución de una planta de tratamiento de residuos de construcción y demolición.

Asimismo, el resto de las autorizaciones son para la instalación de una planta de biodiésel, en la provincia de Málaga; repotenciación de un parque eólico con nuevos aerogeneradores, en la provincia de Cádiz; para el proyecto de una central de cogeneración para evaporación de aguas residuales de una planta de aderezo de aceitunas y producción de energía eléctrica, en la provincia de Sevilla; y para la instalación de una planta de biodiésel y un parque eólico, en la provincia de Huelva.

El contenido del permiso integrado incluye, entre otros fines, los dirigidos a garantizar el cumplimiento de los límites de contaminación fijados en la normativa; evitar y reducir en origen la producción de residuos y las emisiones y vertidos, y evaluar las repercusiones de las actividades autorizadas sobre la fauna y flora silvestre y sus hábitats naturales.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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