ReVolt Technology desarrolla baterías recargables de zinc aire para vehículos eléctricos

ReVolt Technology ha solicitado 30 millones de dólares dentro del programa del gobierno de Estados Unidos para acelerar el desarrollo tecnológico de las baterías de zinc-aire para posibilitat vehículos eléctricos con mayor autonomía.

ReVolt también acaba de anunciar que ha seleccionado a Portland, en Oregón como sede y centro productor en Estados Unidos.

Las baterías es el elemento clave de un vehículo eléctrico. Las de zinc-aire almacenan tres veces más electricidad que las mejores de iones de litio.

Las baterías de zinc-aire son una clara alternativa a las de iones de litio. Tienen una densidad energética de 370 Wh/kilogramo. Algunos expertos califican al zinc como el combustible eléctrico del futuro. Entre sus principales ventajas destaca su facilidad de carga y su alto potencial energético. A diferencia de otros tipo de baterías estas necesitan que el vehículo eléctrico vaya equipado con un sistema de filtrado e inyección de aire y de un sistema de monitoreo a bordo.

La tecnología zinc-aire respetuosa con el medio ambiente encuentra su mejor aplicación en prótesis de oído, aparatos electrónicos portátiles y en el sector automotriz. Las baterías de zinc-aire han reemplaza por completo las baterías de mercurio en las prótesis de oído y, quizás, también reemplazarán a las de litio en los futuros automóviles eléctricos.

La tecnología zinc-aire, una tecnología simple, efectiva y de bajo coste, puede ser utilizada como una solución alternativa en los coches eléctricos y en los aparatos electronicos portátiles.

Según la consultora Frost & Sullivan, el mercado mundial de baterías de zinc-aire generó unos ingresos de 251 millones de dólares en 2005, que aumentará rápidamente debido a la mayor utilización de las baterías zinc-aire en aplicaciones emergentes, como los automóviles eléctricos.

Las baterías zinc-aire son del tipo primarias, por lo que una vez agotada la carga no pueden recargarse sino que hay que extraer el zinc y cargarlo fuera de la batería. Sin embargo, la carga del zinc es fácil y rápida.

Uno de los grandes inconvenientes de la tecnología metal-aire es el hecho de que se trata de baterías primarias no recargables. Ello hacía que fuese necesario comprar pilas nuevas o tratar de sacar el electrolíto y el hidróxido e introducir nuevo metal dentro.

Por esta razón la investigación va encaminada a conseguir una batería recargable basado en los sistemas metal-aire. La empresa ReVolt ya ha desarrollado la primera batería de Zinc-aire recargable, un salto de gigante para la nueva era del vehículo eléctrico.

Este tipo de batería puede proporcionar 3 veces más duración que las de plomo-ácido. Las pilas a base de zinc tienen como principal ventaja la posibilidad de ser recicladas sin límite, sin perder ni sus cualidades químicas, ni sus cualidades físicas.

A pesar de que el zinc representa una fuente de energía limpia y duradera para el futuro, sin embargo, se desconoce el impacto que podría tener su uso masivo sobre el medio ambiente. El zinc se usa en la producción de acero galvanizado, que representa la mitad de su mercado. Un tercio del zinc consumido, se produce a partir del reciclado del zinc usado.

Las baterías Zinc Air Prismatic de Energizer concentran mayor cantidad de energía en un tamaño más reducido, y prometen ser una revolución. Energizer afirma que en el mismo tamaño, su tecnología proporciona el triple de autonomía que una pila de iones de litio actuales. Duracell, una de sus marcas rivales, también está desarrollando pilas Zinc Air.

Este avance ha sido el fruto de varios años de trabajo conjunto de la marca de pilas y baterías con los fabricantes de electrónica de consumo, enfocando el desarrollo hacia equipos más pequeños pero con buena autonomía.

El diseño y principio de las baterías zinc-aire es relativamente simple, pero su construcción no lo es, ya que el electrodo de aire debe ser extremadamente delgado. Se han hecho muchos estudios y grandes avances en el sellado del aire, pero aún queda mucho camino por recorrer.

El Ministerio de Industria y el CSIC ya tendría que haber destinado varias decenas de millones de euros a investigar y promover las baterías de zinc-aire, una de las tecnologías más prometederas para un país como España, que ni tiene petróleo ni litio, pero sí abundantes recursos de energía eólica y solar, y está esperando como agua de mayo una tecnología como las baterías recargables de zinc-aire, que tiene una densidad energética que triplica a las de las mejores baterías de litio.

www.revolttechnology.com/

www.revolttechnology.com/res/presentation/White%20paper%20ReVolt%20Technology_280307.pdf

www.revolttechnology.com/res/news/2008%20Company%20presentation%20Update%20Aug%2008.pdf

www.meridian-int-res.com/Projects/The_Zinc_Air_Solution.pdf