Cuba obtendrá con energías renovables, eólica y energía solar, el 24% de su consumo.

Cuba anuncia construcción de 13 parques eólicos con capitales extranjeros

REVE

Empeñado en reducir la dependencia de los combustibles fósiles, el gobierno cubano estudia hoy la construcción de varios parques eólicos, algunos con inversión extranjera directa, como parte de un programa de desarrollo a mediano plazo de fuentes de energía renovable.

El ministro de Energía y Minas (MINEM), Alfredo López, al intervenir en julio último en una sesión del Parlamento, adelantó que en la costa norte de las regiones central y oriental de la isla, está prevista la construcción de 13 parques eólicos, siete de ellos con inversión extranjera.

El ministro no detalló la nacionalidad de las empresas extranjeras interesadas en ese proyecto, aunque en una reciente visita a la isla, el canciller de Italia, Mario Giro, dijo que entidades italianas evalúan la instalación de tres de esos parques, un proyecto que podría concretarse en octubre venidero.

También España ha manifestado interés por invertir en ese sector, por lo que han viajado a La Habana varias delegaciones, como la encabezada hace unas semanas por el titular español de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria.

El director de Energía Renovable de MINEM, ingeniero Rosell Guerra, dijo que por la fuerza de los vientos las zonas mejores condiciones para la instalación de esos parques se ubican en Banes y Gibara, en la oriental provincia de Holguín, y en Maisí, en la provincia de Guantánamo, extremo este de la isla.

En la isla hay más de 26.000 centros que emplean diferentes fuentes renovables, los cuales aportan cerca del 20% de la energía generada en el país, de unos 600 gigawatts (GW). Según investigadores de la Empresa de Ingeniería y Proyectos para la Electricidad (INEL), las potencialidades del uso del viento en la isla alcanzan los 1.200 megawatts (MW), en especial en la costa norte de toda la isla, pero de manera particular en las zonas central y oriental.

No obstante, el experto aclaró que esas plantas necesitan grandes y significativas infraestructuras para la transportación y distribución de la energía eléctrica que generen, como líneas eléctricas y viales.

Cuba espera llegar al 2030 con el 24% de la electricidad generada a partir de fuentes renovables, lo que disminuirá la dependencia de la isla de los combustibles fósiles, el alto costo de la generación por esa vía y la correspondiente contaminación ambiental.

El empleo de esos generadores movidos por la fuerza de los vientos también evitaría a la isla la emisión de más de 300.000 toneladas anuales de dióxido de carbono y de otros gases de efecto invernadero.

En el 2030, las fuentes renovables deben aportar más de 2.000 MW al Sistema electroenergético cubano.

En la isla hay más de 26.000 centros que emplean diferentes fuentes renovables, los cuales aportan cerca del 20% de la energía generada en el país, de unos 600 gigawatts (GW).

La actual infraestructura del sector de las energías renovables en Cuba incluye 10.595 calentadores solares, 9.343 molinos de viento, 827 plantas de biogás, y 169 instalaciones hidroeléctricas, junto a otras capacidades en paneles y parques solares.

El uso del molino de viento para el bombeo de agua es tradicional en el archipiélago cubano donde se emplean más de 9.000, de acuerdo con la Sociedad Cubana para la Promoción de la de las Fuentes Renovables de Energía y el Respeto Ambiental (CUBASOLAR).

En la actualidad, Cuba tiene en activo tres parques eólicos ubicados en Holguín, Ciego de Avila y la Isla de la Juventud que aportan en conjunto al Sistema Electroenergético Nacional unos 11,70 MW y utilizan tecnología francesa, china y española.

A raíz de la crisis energética de 2004 y 2005, el gobierno cubano priorizó el uso y desarrollo de las fuentes renovables para la producción de electricidad y el ahorro de combustibles fósiles.