Avion Solar Impulse 2 aterriza en China con energía solar fotovoltaica

REVE

El avión Solar Impulse 2 despegó este lunes al alba de la ciudad birmana de Mandalay con rumbo a Chongqing, en China, en la quinta etapa de esta primera vuelta al mundo de un avión que se mueve solo con energía solar fotovoltaica.

El equipo del avión monoplaza pasó más de una semana en Mandalay a la espera de que las condiciones meteorológicas en el suroeste de China mejoraran para emprender una de las etapas más difíciles del intento de dar la vuelta al mundo.

Desde el puesto de control de la misión en Mónaco, el príncipe Alberto dio en directo la autorización de despegar al piloto Bertrand Piccard.

Solar Impulse

«Bertrand, de Alberto, puede salir. Buen vuelo», declaró el príncipe Alberto.

«Muchas gracias amigo mío», respondió el piloto antes de despegar hacia las 03H35 hora local (21H05 GMT del domingo) para emprender un vuelo de 1.375 km que espera recorrer en unas 18 horas.

Bertrand Piccard, que es uno de los dos pilotos suizos de Solar Impulse 2, tendrá que afrontar un frío extremo con temperaturas que descienden por debajo de los 20 grados Celsius en la cabina, así como las altas cumbres de las provincias de Yunnan y Sichuan en China.

Avión Solar Impulse completó su travesía por EEUU
Avión Solar Impulse completó su travesía por EEUU

Asimismo, va a sobrevolar una zona aislada de la región fronteriza entre Birmania y China, donde se registran intensos combates entre rebeldes chinos de la etnia mayoritaria Kokang y el ejército birmano.

Le SI2, que salió de Abu Dabi el 9 de marzo, pretende recorrer en total 35.000 kilómetros únicamente con energía solar. Esta vuelta al mundo llevará cinco meses, de los que 25 días son de vuelo efectivo, antes de regresar al lugar de salida a finales de julio o principios de julio.

First Test Flight of Solar Impulse 2 in Abu Dhabi, United Arab Emirates

Prevista en 12 etapas, la vuelta al mundo es el broche de 12 años de investigación realizada por André Borschberg y Bertrand Piccard quienes, además del logro científico, tratan de llevar un mensaje político.