Ejecutivos de Acciona, Dow, SENER y TSK se reunieron esta semana en Madrid para celebrar una sólida relación entre las empresas y un compromiso con los mercados emergentes de la termosolar o energía solar termoeléctrica (Concentrated Solar Power – CSP, por sus siglas en inglés). “A medida que nuevas regiones adoptan e invierten en proyectos de CSP, están confiando en líderes tecnológicos con experiencia y capacidad para crear instalaciones de generación de energía a nivel mundial. Como proveedor líder de fluidos de transferencia de calor para CSP, estamos dispuestos a crecer con la industria de la energía solar”, expresó Juan Antonio Merino, Vicepresidente Comercial de Dow para Europa, Oriente Medio y África. “Dow posee la capacidad, la envergadura y una inmejorable posición a nivel mundial para seguir a sus socios en todos los proyectos independientemente de donde se ejecuten”, añadió Merino. Dow anunció que suministrará el fluido térmico DOWTHERM™ A a dos nuevas plantas de CSP en construcción, Noor 1 en Marruecos y Bokpoort en Sudáfrica. Un consorcio formado por las compañías españolas Acciona, SENER y TSK obtuvieron la adjudicación del contrato de Ingeniería y Construcción de las plantas propiedad de Acwa Power. Hoy en día, más de 35 plantas de CSP emplean el fluido térmico DOWTHERM™ A y suministran suficiente capacidad de generación eléctrica para cubrir las necesidades de más de 1 millón de hogares, con un ahorro cercano a los 4 millones de toneladas métricas de emisiones de CO2 por año. “La adjudicación de los fluidos de transferencia térmica de Dow a los proyectos Noor 1 y Bokpoort da testimonio de la trayectoria de Dow, SENER, TSK y Acciona y de su voluntad de trabajar juntos en la búsqueda de la eficiencia y la excelencia,” declaró Carlos López, Director General de ACCIONA Ingeniería. “Trabajar con proveedores como Dow, con capacidad para prestar un servicio a nivel mundial, es fundamental para los contratos llave en mano en plantas termosolares, donde SENER ha participado en más de 25 proyectos de este tipo, suministrando tecnología propia, como los colectores cilindro-parabólicos SENERtrough®,” afirmó Ernesto Álvarez, Director de Desarrollo de Negocio de Energía y Procesos de SENER. “La tecnología de SENER, Acciona y TSK, al igual que los fluidos térmicos de Dow, garantizarán la eficiencia requerida por estas dos plantas”. “En TSK siempre hemos dado la máxima prioridad a valores como el compromiso, la fiabilidad y la calidad en el momento de elegir a nuestros principales proveedores,” afirmó Oscar Rodríguez Acinas, Director de Compras de la División de Energía y Plantas Industriales de TSK. “Hemos mantenido una estrecha relación con Dow desde que comenzamos a trabajar en el mundo de la energía termosolar y consideramos a Dow un colaborador directo en nuestros proyectos de CSP.” “Con la tecnología avanzada que suministra el fluido de transferencia térmica de mayor pureza del mercado, la capacidad de producción, así como la cadena de suministro a medida y las capacidades logísticas, a escala mundial, Dow se convierte en el mejor socio para respaldar el éxito de los clientes de CSP y el crecimiento del sector a largo plazo”, reconoció Carolina Barrios, Directora de Marketing del negocio de Dow Heat Transfer Fluids. Noor 1 es el primer proyecto de CSP de este tipo en Marruecos y, a su vez, la planta inicial de las 6 que contemplan los planes de energía solar de Marruecos definidos por la Agencia Marroquí para la Energía Solar (Masen). La planta de 160 megavatios tendrá 3 horas de almacenamiento. El complejo Noor 1 está configurado para convertirse en un parque de energía solar de 500 megavatios, que incorporará varias plantas de energía solar a escala comercial utilizando diversas tecnologías solares. Bokpoort tendrá una capacidad de generación neta de 50 megavatios con 9 horas de almacenamiento de energía térmica y forma parte de la segunda ronda del Programa Sudafricano de Contratación de Productores Independientes de Energía Renovable. Una vez completado, será la planta de CSP con la mayor duración de almacenamiento térmico del mundo. La construcción de Noor 1 y Bokpoort ya ha comenzado, y se prevé que ambas plantas entren en funcionamiento en el segundo semestre de 2015. Cómo funciona CSP CSP utiliza espejos parabólicos para reflejar y amplificar el calor solar sobre un circuito cerrado que contiene fluido de transferencia térmica DOWTHERM™A. Este fluido recoge la energía térmica y la transporta a una central generadora donde se usa para producir vapor, que mueve turbinas para generar electricidad. Las tecnologías de energía solar como CSP ofrecen numerosas ventajas en zonas que requieren nuevas fuentes de energía que sean fiables. La tecnología ayuda a diversificar la oferta de energía, ya que es capaz de producir energía durante los periodos de máxima demanda y reduce la dependencia de los combustibles fósiles. Cuando se usa para sustituir a una planta generadora que emplea combustibles fósiles, las instalaciones CSP contribuyen a mejorar la calidad del aire y pueden ayudar a los países a cumplir con los objetivos fijados para las emisiones de carbono producidas por las plantas existentes basadas en combustibles fósiles. A diferencia de las tecnologías de energía solar fotovoltaica y de energía eólica, las plantas CSP pueden funcionar conjuntamente con una tecnología de almacenamiento térmico económica capaz de suministrar energía a demanda, lo que convierte a CSP en una fuente muy flexible de energía renovable. http://www.helionoticias.es/noticia.php?id_not=1311 termosolar, Protermosolar, CSP, España, Sener, Dow, Acciona, TSK, Acciona, CSP, Dow, España, Protermosolar, Sener, termosolar, TSK

Termosolar: Otras vías para atajar el déficit de tarifa, por Luis Crespo, Secretario General de Protermosolar

REVE

Sin ningún diálogo, con hipótesis erróneas de partida y con una clara toma de posisión en contra de las energías renovables, se han lanzado a promulgar leyes con una interpretación muy particular de lo que significa el interés general y con medidas injustas que quitan a unos para incrementar los privilegios de los otros.

En numerosas manifestaciones hemos escuchado, tanto al Ministro como al nuevo Secretario de Estado de Energía, repetir que, para corregir el problema del déficit tarifario, se aplicarán medidas pensando en el interés general y no en el particular, así como también que la solución al déficit es la de un juego de suma cero.

Nunca tantas, ni tan rápidas, ni tan blindadas decisiones han vulnerado tantos principios como las últimas legisladas en materia de energía; aquellas que abanderando el objetivo o pretexto de reducción del déficit tarifario han diseñado una cura de adelgazamiento radical y cortoplacista que vulnera principios fundamentales de nuestro ordenamiento jurídico, entre ellos, el de seguridad jurídica, confianza legítima, rentabilidad razonable, así como los límites de las expropiaciones, incluido en el Convenio de la Protección de los Derechos Humanos y las Libertades Fundamentales.

El sentido común invita a pensar que la toma de decisiones importantes requiere, al menos como punto de partida, conocer la base sobre la que realizar cálculos correctos y esto, al menos en lo que respecta a la tecnología termosolar, no se ha hecho. Las previsiones que toma como referencia el RDL 2/2013 estiman para finales de este ejercicio un total de 2.521 MW instalados, cuando en realidad sólo se alcanzarán los 2.300 MW. Esta sobreestimación se traslada a las primas que, lógicamente, no hubieran sido de 1.570 millones antes de las últimas medidas, sino que hubieran sido, en todo caso, de 1.270 millones. O lo que es lo mismo, el simple ahorro de los 300 millones derivado de este error en el sector termosolar haría innecesario la adopción de las medidas recogidas en el Real Decreto Ley y la Orden Ministerial cuyas consecuencias, de mantenerse, serán inasumibles para esta industria. Sólo un apunte, la termosolar aportó a nuestra economía, sólo en conceptos de contribución al PIB e impuestos, un total de 2.607 millones de euros en 2012, frente a los 927 millones de euros que recibió en primas.

Otro error de cálculo es hacernos creer que el déficit tarifario -ese que ya ascendía a 14.000 millones de euros en 2008, antes de instalar un MW termosolar en España- está causado por las primas  del régimen especial, cuando se debe, a partir de 2008, a la decisión política de no trasladar la totalidad de los costes regulados a los consumidores finales, de los que las primas a las renovables representan sólo la tercera parte.

O lo que es lo mismo, para solucionar un problema no originado por las fuentes renovables se pone el acento en la reducción de los costes del sistema de las renovables, mientras se continúan incrementando los costes de distribución, de cuyo elevado EBITDA presumen las compañías eléctricas; o los anacrónicos costes de la Moratoria Nuclear o de la Interrumpibilidad, cuando el exceso de capacidad instalada lo hace completamente innecesario. Por otra parte se mantienen camuflados en el término de energía del recibo de la luz las cuantiosas subvenciones que siguen recibiendo los ciclos combinados, hoy casi un 20% más elevadas que en 2010.

Sin embargo, el RDL 2/2013 apuesta por la reducción de la retribución a las energías renovables en unos 800 millones de euros -en el caso de la termosolar, unido al impacto de la Ley 15/2012 representa un recorte del 37% en sus ingresos-, mientras que aumentará la retribución de otras actividades reguladas en unos 1.000 millones de euros. ¿Por qué obligar a ir a tarifa a las renovables en lugar de promover una auditoría de costes para fijar una retribución que permita funcionar con una rentabilidad razonable a las centrales nucleares -que no participan en el mercado- o a las hidráulicas, cuya operación combinada con el bombeo debería además realizarse sin ninguna sospecha especulativa?. Pasar a tarifa a las nucleares e hidráulicas podría representar un ahorro de 1.000 millones de euros al año a los costes del sistema.

Otro importante error es no haber evaluado correctamente la pérdida de  confianza en la seguridad jurídica de nuestro país de cara a las inversiones extranjeras (y nacionales). Esto trasciende nuestras fronteras y nos llevará a los tribunales en el caso de los inversores nacionales y a las cortes de arbitraje internacional en el caso de los extranjeros -un 35% de la inversión acumulada del sector termosolar, que asciende a cerca de15.000 millones de euros- cuando demanden al Reino de España por inseguridad jurídica. Lo que reclama nuestro gobierno frente a las decisiones expropiatorias e injustas adoptadas en países como Argentina, Bolivia o Venezuela, es aplicado aquí a golpe de Real Decreto Ley con resultados confiscatorios sin posibilidad de recurrir, modular o dialogar.

El sector de las renovables ha sido recurrentemente vapuleado por cambios regulatorios caprichosos desde 2009 y, en concreto, el de la Termosolar por las dos últimas regulaciones con rango de ley, que acabarán por certificar la defunción de una industria emergente y pionera en nuestro país, que tiene incuestionables aportaciones, en términos de generación de empleo y riqueza, seguridad de suministro energético, estabilidad de los precios del pool, atracción de capital extranjero y capacidad de reconversión del tejido industrial tradicional y en la que,  además, estamos reconocidos como líderes mundiales.

Contamos con los mejores emplazamientos de Europa para protagonizar un escenario futuro de participación mayoritaria de las renovables en el continente, disponemos de una tecnología como la termosolar cuya producción se ajusta a la curva de la demanda, es predictiva y regular y su capacidad de almacenamiento contribuye a facilitar la gestión del sistema eléctrico, está cumpliendo rigurosamente sus objetivos de planificación y su denostado efecto sobre las primas no representa más del 3% del déficit tarifario acumulado.

¿Por qué destrozar un sector como el renovable que -excluida la hidráulica- representa más del 25% de la generación eléctrica del país? ¿Por qué legislarlo a golpe de reales decretos de ley sin capacidad de recurso efectivo? ¿Por qué pasar ‘ a tarifa’ a las renovables -alguna de ellas al principio de su operación- y no hacerlo con la nuclear o la hidráulica, ambas amortizadas?. ¿Por qué poner en entredicho la seguridad jurídica de las normas que rigen nuestra economía y las inversiones empresariales? ¿Por qué legislar algo tan sustancial para el futuro del sector sin permitir a sus agentes un diálogo abierto y profundo sobre el mix energético óptimo para nuestro país? ¿Por qué no evitar errores de cálculo? Destrozar una industria emergente y cargarse la confianza en la seguridad jurídica de España ¿es defender intereses generales frente a los particulares?

En los últimos meses se ha escuchado que la solución al déficit de tarifa es un ‘juego de suma cero’, pero hasta el momento este se ha saldado con medidas drásticas, severas, erróneas e injustas para el sector renovable. Si de jugar se trata, hagámoslo desde el diálogo, con valoraciones y estimaciones correctas y bajo un enfoque estratégico, que evite destrozar esta industria, la imagen de un país y el contagio al sector financiero.

http://www.helionoticias.es/noticia.php?id_not=1027