El potencial de las energías renovables para el empleo

REVE

Hoy se ha hecho pública la encuesta de población activa que ha alcanzado la cifra de la que se desprende que el desempleo ha alcanzado los 5.778.100 y se sitúa, por primera vez, por encima del 25% de la población activa. Ecooo considera que existen alternativas de generación de empleo, que el Gobierno está ignorando o directamente bloqueando.

Ante una cifra de paro tan elevada, se hace preciso el fomento de sectores productivos que presentan un potencial muy elevado de empleo. En este sentido, sectores como el de renovables y la rehabilitación de viviendas tienen un potencial que debería ser potenciado por las administraciones.

Un reciente estudio de la Organización Internacional del Trabajo señalaba que la oportunidad para el empleo, si se apuesta por la economía ecológica, podría alcanzar los dos millones de puestos de trabajo durante esta década en España.

En el caso de las renovables, el potencial de empleo asciende a 125.000 trabajos si se alcanza el objetivo marcado por la UE que fija que para 2020 el 20% de la energía generada debe provenir de renovables. Las condiciones físicas de España permitirían superar de largo ese 20% como demuestran diferentes estudios, como el que señala que Vitoria podría generar el 75% de la energía que consume sólo con fotovoltaica.

En este sentido, es imprescindible que el Gobierno establezca las pautas regulatorias que permitan el desarrollo de las renovables. Esto contrasta con la posición manifiesta del Gobierno al rechazar de manera constante el autoconsumo eléctrico que favorecería el desarrollo de la fotovoltaica en los hogares.

Según el estudio de la OIT, el mayor potencial de creación de empleo se encuentra en la rehabilitación de viviendas y edificios y podrían llegarse a crear 1,37 millones de empleos si se acondicionasen 25 millones de viviendas. Este factor redundaría en una mayor eficiencia energética de los hogares, supondría un ahorro neto en la factura eléctrica y reduciría la contaminación.

Todos estos elementos ponen de manifiesto la idoneidad de apostar por medidas que, además de generar empleo, aseguren un futuro basado en energías limpias y garanticen la soberanía energética y la independencia de combustibles fósiles.