Ecologistas piden rigor a la UE en las pruebas de estrés a las centrales nucleares

Las asociaciones ecologistas han aprobado la decisión de la UE de realizar pruebas de estrés a las centrales nucleares pero piden que realicen de forma "seria" y que "no sirvan para salir del paso por la situación actual" y después "no sirva para nada", según ha explicado el portavoz de la campaña nuclear de Greenpeace, Carlos Bravo.

Así, Bravo ha calificado como "buena" la noticia y ha señalado que los test que se practiquen deben ser "rigurosos y que comprueben de manera exhaustiva la capacidad de contención de los sectores primario y secundario de las centrales, así como sus tuberías" causantes del vertido radioactivo de la central de Garoña (Burgos), ha recordado.

Del mismo modo, ha señalado que el Gobierno debería centrarse en las centrales nucleares más viejas y, por lo tanto, "las más peligrosas". En este sentido, ha denunciado el "envejecimiento del parque nuclear" español y ha destacado que el agotamiento de los materiales en un reactor es muy importante por lo que "no es normal que cuanto más viejas son las centrales más largo es el permiso de vida que les conceden".

Por su parte, el portavoz de las Campañas Nucleares de Ecologistas en Acción, Francisco Castejón, ha señalado que les parece "bien" la decisión de los países miembros de la UE aunque creen que esta iniciativa "no debe ser aislada o temporal", a su juicio, las pruebas que se realicen deben de "conjugarse con el calendario" de las centrales nucleares. Castejón ha lamentado que se haya tomado esta decisión "tras una catástrofe cuando la organización viene denunciando desde hace años mayor seguridad", aunque ha reconocido que "más vale tarde que nunca".

Finalmente, la portavoz de WWF-España, Raquel García, ha explicado que "todo lo que sea terminar con la ampliación de vida útil de las centrales nucleares y fomentar su cierre" es positivo porque "considera que la nuclear no es una opción energética" por su "peligrosidad". Así, ha recordado que WWF-España apoya el fomento de la inversión en las energías renovables como "una opción de transición a un modelos sostenible y limpio".

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.