Sota censura la demagogia contra el plan eólico de Cantabria

Sota se pronunció así en el acto inaugural de la XI Jornada de Salud Laboral y Medio Ambiente de la Federación de Industrias Afines (FIA) de UGT, donde el consejero advertió que el plan eólico aún está en su fase inicial y "todavía no se ha llegado a decidir dónde se ubicarán los parques eólicos y los aerogeneradores".

El titular de Industria y Desarrollo Tecnológico ha aclarado que el plan eólico sólo se limitará en su actual fase inicial a asignar la potencia eólica de los siete grupos empresariales seleccionados entre los 51 presentados al concurso, para que luego "las propias empresas eólicas presenten sus proyectos en los lugares idóneos en la siete áreas geográficas determinadas".

"Hasta entonces no se someterá todo al impacto medioambiental", ha subrayado Sota, tras recalcar que "sólo un 2 por ciento" de la superficie de la región es admisible para albergar aerogeneradores eólicos.

El titular de Industria ha criticado que la oposición al plan eólico sólo se base en falsas informaciones porque "está claro que todos los proyectos del Gobierno, que son buenos para Cantabria, son malos para el PP y su entorno social.

Sota aseguró que la energía eólica es el desarrollo regional porque Cantabria no puede quedarse descolgada de un movimiento por las energías renovables que ya es mundial, y está encaminado a reducir las emisiones de CO2.

Sota incidió en que el Gobierno ha dejado bien claro que las empresas que quieran explotar los recursos eólicos de Cantabria tendrán que compensar a la región con proyectos industriales y de I+D+i para generar empleo, riqueza y potenciar el tejido productivo.

"Nosotros no cobramos cánones como hacen otros gobiernos autonómicos, como el PP en Galicia, porque el plan eólico no es para dar dinero al Gobierno regional, sino para modernizar y generar riqueza para Cantabria", agregaó.

"Si rechazamos las centrales nucleares, los ciclos combinados u otras alternativas de fuentes energéticas fósiles, nos tendremos que volcar con las energías renovables porque es a lo que se tiende en todo el mundo", aseveró José Ramón Pontones, secretario general de FIA-UGT.

Siempre que se intenta desarrollar la eólica en alguna región, se desata la reacción de quienes prefieren Garoña, los residuos radiactivos y el CO2. La biodiversidad no se conservará sin frenar el cambio climático.

El desarrollo eólico proyectado por el Gobierno cántabro prevé generar una potencia de unos 1.500 megavatios y propiciar una inversión directa de alrededor de 2.000 millones de euros.

El concurso de parques eólicos, que se convocó en junio, dividió Cantabria en siete zonas susceptibles de acoger parques eólicos. Sólo supone un 2 por ciento del territorio de Cantabria (10.500 hectáreas) se puede aprovechar para instalar parques eólicos, por lo que se dejarán de explotar más de 2.000 MW eólicos, algo que prefieren ocultar los críticos del plan eólico.

El gobierno de Cantabria defiende el impulso de la energía eólica por tratarse de una energía limpia y renovable sin residuos radiactivos ni emisiones de CO2, y también por las implicaciones económicas y de desarrollo.

Lo deplorable es asistir a una campaña permanente y diaria contra la energía más limpia y la que menos perjudica al medio ambiente, según todos los estudios. Tanta irresponsabilidad, disfrazada de "eólica sí, pero aquí no o no a cualquier precio", es decir, en ningún sitio, tendrá consecuencias.

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